Chihuahua, Chih.- En el fraccionamiento San Francisco ya no saben si viven en una zona residencial o si cada fin de semana abren lobby en Warzone o Free Fire.
Vecinos hartos aseguran que el ruido de balazos y los pleitos a puño limpio ya son parte de la amenidad, como si fueran parte del paquete de mantenimiento.
El hartazgo reventó el pasado fin de semana, cuando un guardia de seguridad terminó agarrándose a golpes con un residente, quien no se quedó atrás y respondió con impactos de arma de fuego.
El escándalo dejó a toda la colonia en vilo y confirmó lo que muchos ya venían advirtiendo: la violencia ya se instaló como “invitada especial” en cada pachanga.
A través de audios que circulan entre los habitantes, se escuchan reclamos furiosos contra la falta de autoridad dentro del fraccionamiento, donde dicen, cada fiesta podría acabar en un episodio digno de película bélica.
Las constantes reuniones, borracheras y ahora también balaceras han generado un ambiente de miedo entre quienes pagaron por vivir en un “lugar tranquilo” y ahora tienen que dormir con un ojo abierto, no vaya a ser que el siguiente madrazo les toque a ellos.
Con este nuevo altercado, los vecinos exigen soluciones inmediatas y advierten que, de seguir así, mejor instalan trincheras en las banquetas y compran casco para aguantar el siguiente “fin de semana de guerra”.
