Chihuahua, Chih. – Este viernes, las calles de la ciudad fueron invadidas por una atmósfera de devoción, arte y espiritualidad, como cada año, en el evento tradicional del Viacrucis.
Con la participación de cientos de feligreses, las diversas colonias de Chihuahua fueron el escenario de esta representación tan significativa para la religión católica.
El Viacrucis, una de las tradiciones más arraigadas en la Semana Santa, revive el sufrimiento y sacrificio de Jesucristo. En este año, como en los anteriores, las iglesias y barrios de la ciudad se unieron para llevar a cabo una representación que no solo es un acto religioso, sino también una muestra de arte comunitario.
En la colonia San Rafael, el recorrido comenzó desde temprana hora, cuando los primeros pasos de los actores —en su mayoría miembros de la comunidad— comenzaron a revivir cada estación del Viacrucis.
A lo largo de las calles, se formaron escenas que emocionaron a los asistentes: la crucifixión, el dolor de Jesús, las caídas, y el sufrimiento, todo con una gran carga de emoción y realismo.
El Viacrucis en San Rafael, como en otras colonias de la ciudad, es un evento que no solo reúne a feligreses, sino que también forma parte de la identidad cultural de los chihuahuenses.
Es un recordatorio de la pasión de Cristo y un acto que invita a la reflexión personal. Los organizadores destacaron que este evento tiene un propósito claro: no solo rendir homenaje a la figura de Cristo, sino también fortalecer los lazos de comunidad, unidad y fe entre los asistentes.
A medida que el día avanzaba, el ambiente espiritual fue cobrando fuerza, y el Viacrucis continuaba su marcha por las calles de la colonia.
Las escenas del camino de Jesús hacia el Calvario fueron presentadas de una manera tan vívida que los asistentes, muchos con los ojos llenos de lágrimas, podían sentir el sufrimiento de cada paso.
Finalmente, al concluir el evento, se vivió un momento de comunión entre los asistentes. Todos, en silencio, reflexionaron sobre el verdadero significado de la Semana Santa y el sacrificio de Jesús.
El Viacrucis en la colonia San Rafael no solo fue una representación teatral, sino una verdadera vivencia religiosa que tocó el corazón de todos los presentes.
Con un evento tan emotivo, la ciudad sigue demostrando que sus tradiciones siguen vivas y que la fe sigue siendo un pilar fundamental para muchos de sus habitantes.
