Las fábricas de Lamborghini en Italia podrían verse afectadas por las amenazas de aranceles del 25% de Donald Trump, ideados para inducir la relocalización de plantas hacia Estados Unidos. Sin embargo, el Director Ejecutivo de la marca desmintió planes de trasladar la producción fuera de Italia, enfatizando que Estados Unidos, que representó casi un tercio de las ventas del año pasado, seguirá siendo el principal mercado.
El ejecutivo explicó que, de producirse una caída en ventas por los aranceles, la estrategia sería redistribuir los vehículos hacia otros de los 56 mercados donde opera la marca, sin cerrar el mercado estadounidense. Además, destacó que la mayoría de las autopartes provienen de proveedores europeos, lo que podría minimizar el impacto de las nuevas medidas arancelarias.
