Luego de que ciudadanos denunciaran un presunto abuso de autoridad por parte de elementos de la policía municipal, el alcalde Marco Bonilla aclaró que el incidente se originó por un conflicto personal, marital y no por un acto arbitrario de la corporación. Explicó que todo comenzó cuando una mujer intentó agredir a una cajera dentro de un centro comercial, derivado de una discusión marital. La persona fue detenida por faltas administrativas.
El alcalde señaló que el material audiovisual difundido en redes muestra solo una parte de los hechos y omite el momento en que la detenida es remitida sin oponer resistencia. Sin embargo, al llegar su esposo, cuñado y hermana, se enfrentaron a los oficiales, generando una agresión contra los policías. Aclaró que la remisión fue validada conforme al Bando de Policía y Buen Gobierno y que, como en cualquier otro caso, fue el juez cívico quien determinó si la detención era legal o no.
En su mensaje a la ciudadanía, el edil instó a evitar situaciones que puedan derivar en enfrentamientos con la autoridad y pidió tener cuidado con la difusión de videos editados o sacados de contexto. “Nadie tiene derecho a hacer justicia por su propia mano, para eso existen las instituciones”, enfatizó. También reiteró que la policía municipal solo realiza el traslado de los detenidos, pero es la instancia judicial quien califica las detenciones.
