Cuauhtémoc, Chih. – Amelia Q.P., quien seguramente pensó que tener una navaja era la solución a todos sus problemas, ahora enfrenta cargos por homicidio en grado de tentativa tras intentar asesinar a un hombre en la colonia Emiliano Zapata. Todo comenzó cuando Amelia se sintió tan enfadada que decidió tomar la justicia en sus manos, y no precisamente de la manera correcta. ¿La razón? Aparentemente, una orden de restricción y la navaja como aliada perfecta.
El resultado de esta brillante idea fue que la víctima terminó con heridas en cuello y nuca, mientras Amelia, como toda una profesional, decidió abandonar la escena con su navaja en mano. Para suerte de la víctima, la policía apareció, detuvo a la agresora y ahora ella tendrá que explicar por qué la navaja fue su respuesta a todo. Al final, no fue solo un intento de homicidio, sino también un episodio digno de una serie de crimen que dejó claro que, a veces, las personas simplemente no saben controlar su ira.
